viernes, 23 de mayo de 2014

Francesco Tonucci

Videoconferencia

¿Cómo puede ser la escuela para el mañana? Por Francesco Tonucci

En su conferencia brindada en el Parque de las Ciencias de Granada, el 13 de Febrero de 2012, Francesco Tonucci  plantea que el título de la misma esconde varios problemas.

Teniendo en cuenta que probablemente la escuela no sea buena para el mañana, difícilmente pueda ser buena para hoy. Estamos dudando de que la escuela que tenemos hoy no sea suficiente.

Muchas veces se escucha hablar de que la escuela de antes era mejor. Tonucci cuestiona esto, diciendo que lo que caracteriza a la escuela de su infancia es que era una escuela para pocos.

Los pocos que seguían en la escuela eran hijos de familias sensibles, cultas o ricas. Niños de familias que ofrecían las bases culturales a sus hijos; y esas familias enviaban a los niños a la escuela para completar la obra que habían empezado en el hogar.


Luego de  la última guerra, con la llegada de las democracias, hay un cambio profundo sobre este tema. Se afirma el derecho al estudio.


Pero el problema más profundo es que la escuela que hoy se ofrece a todos se ha quedado en una escuela para pocos, y esto genera un choque. No ha cambiado profundamente la propuesta escolar. Sigue siendo una propuesta para niños que ya saben bastante y la ofrecemos a niños que no saben nada. Necesitamos una escuela pública para niños que no tienen una familia atrás.


Esta escuela está sufriendo mucho. Antes, la familia era aliada de la escuela; hoy, los padres están asumiendo el papel de sindicalistas de sus hijos. Más allá de eso, la escuela de hoy tampoco les gusta a los maestros, ni a la sociedad.


Así plantea una escuela alternativa. Una escuela para mañana debería ser una escuela para todos, una escuela abierta a la diversidad.


Tonucci afirma que la escuela debe dar las bases culturales a los alumnos, debe ser una escuela rica de estímulos. Para que sea para todos, debe estar interesada en lo que los niños pueden aportar. Una escuela de la escucha, antes que de la propuesta. Debe ofrecer a los niños un abanico amplio de lenguajes.


Plantea que sería bueno que desaparecieran las aulas, y la escuela estuviera formada por talleres: de lectura, de música, de física, de matemática, de ciencias, etc. y los niños pasen de un taller al otro.


Tonucci sostiene que necesitamos personas felices, y este es el desafío de la escuela.

Entonces ¿Cómo podemos conseguir tener otra escuela para mañana, y par hoy? Tener un buen maestro debe ser el primer derecho del estudio de todos los niños. No es necesario modificar la escuela, sino dedicar  la formación del profesorado.


Cambiar las leyes no basta para cambiar la escuela. No se puede obligar a una escuela a cambiar, pero si se puede obligar a un maestro a ser un buen maestro.


Lo único que necesitamos es realizar una escuela de formación de profesores coherente con los principios mencionados anteriormente.

 


Escuchar o leer a Francesco Tonucci siempre es tener un espacio de reflexión. Sus palabras tan sabias y coherentes dan lugar a pensar el modo de mejorar en todos los aspectos. Espero que les pase lo mismo al leerlo, y si no, los invito a leer o escucharlo así sea un ratito, porque realmente vale la pena.



 Muchas gracias por su tiempo, y hasta la próxima entrada. 


Marina

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